Solo 3 semanas después de la Universitrail volvía
a ponerme un dorsal, esta vez en el II Trail Villa de Teror, la prueba de casa
y que por tanto casi era una cita ineludible.
Esta carrera iba a suponer la primera desde que iniciaba mi
nueva situación laboral y por tanto la que pondría a prueba el plan de “entrenamiento” adaptado (mas bien plan de mantenimiento), lo que sumado al cansancio acumulado, las pocas horas de sueño que tuve esa semana y que estaba probando por vez primera las Cascadia en competición, confeccionaron una estrategia totalmente light y a verlas venir, sin ningún objetivo marcado
de antemano mas que el de terminar y disfrutar.
A las 9 de la mañana se daba la salida, la prueba era una “gymkhana”
que ocupaba gran parte de los caminos de Osorio, completando los 22km con el
paso por La Laguna
de Valleseco, la zona del Zumacal y el casco de Teror. Por tanto sin grandes
complicaciones mas que los kilómetros iniciales en falso llano "rompepiernas" y la
subida al Pico de Osorio por la parte mas dura de todas, que es a su vez la ascensión
mas ardua de todas a cuantas me he enfrentado en carrera.
Por la parte interior durante los primeros kilómetros. (Foto de Alberto Cardona). |
Empiezo de forma muy tranquila, pero aun así el primer kilómetro
sale en 4:30 y los siguientes en 5 minutos, que para ser en subida está muy
bien y me permiten colocarme en la zona noble de la clasificación. Hay
pulmones. Incluso subo la cuesta completa hasta El Rincón corriendo. Había pulmones.
En ese momento, ascendiendo hacia la antena, empiezan a darme escalofríos, se
me pone el vello de punta y las pulsaciones se me aceleran como nunca. Por
primera vez pienso en abandonar una prueba. “Destrábate y vamos al golpito”. A
partir de ahí me lo tomo con muchísima calma, me quito la música, que empezaba a
agobiarme, me recupero, adquiero un ritmo muy lento, paso por La Laguna donde saludo a mi amigo Dani, y una vez en el primer
avituallamiento, tras ingerir sales, agua, refresco, fruta y convertirlo en mi buffet particular, algo que repito en el segundo, sigo toda la prueba a
un ritmo muy tranquilo. Nunca había “perdido” tanto tiempo en los
avituallamientos y jamás había bebido tanto en una carrera, calculo que
alrededor de 4 litros
y me quedo corto. El calor reinante (mas de 30 grados) y mi estado físico no dejan lugar a muchas florituras.
A partir de ahí poca historia mas, salvo el momento estelar
de la prueba, y es que a falta de medio kilómetro y al verme con fuerza suficiente, decido hacer la parte final de la carrera a un ritmo
alto, que se convierte en muy alto en la bajada final, tan fuerte que en
la peligrosa rampa antes de la última curva de meta pierdo el control y
aterrizo contra el suelo en plancha arrastrándome por el mismo durante varios metros. Casualmente en el lugar donde mas público congregado había (los
gritos de “uy uy uy” aun me resuenan en la cabeza) y afortuna y milagrosamente sin
impactar contra los parterres allí instalados, pues si llega a ser
así la semana de vacaciones pagadas en el todo incluido del Negrín no me la
quita nadie.
Me levanto lo mas rápido que puedo para hacer los últimos
metros y me gritan desde atrás, con la caída había perdido el
dorsal y entrar sin el en meta es sinónimo de descalificación, lo cual hubiera
sido una buena gracia. Gracias a la compañera de las carreras y de Twitter Diana
(@DianaOjeda12) que tuvo a bien alcanzármelo llego al arco final con el en la
mano y un tiempo total de 2:14”56, lo que significó ser el 52º de 236 finishers,
8º en élite y 5º entre los participantes locales.
Algunas de las heridas de guerra. |
De resto poco más que contar, recorrido bonito, aunque
pienso que en Teror se pueden buscar alternativas no tan monótonas y que planteen escenarios más curiosos, avituallamientos correctos y buen ambiente, pues me encontré con una animación por el
recorrido nada frecuente en la mayoría de pruebas. Los voluntarios todos muy
simpáticos, aunque pienso que en algunos puntos se necesitaban mas, como en la
recta de La Pista,
donde no había nadie con el peligro que ello conlleva. Sin ánimo de ser quejica…la
camiseta finisher es muy mejorable para la próxima.
Por último felicitar a mis amigos Reynaldo y Efrén por
acabar una prueba dura por el calor reinante y con tantos problemas, es cuando se pasa tan mal y
se cruza la meta cuando uno gana. Espero compartir con ambos muchas mas
carreras, como con mis compañeros del Carphial AlumTrail Yeray y Román, que por
lesión o trabajo no pudieron estar y a los que extrañé muchísimo durante la jornada.
Nos vemos en la próxima, “La Noche Mágica”, donde la intención
es volver a un ritmo alto y salir “con el cuchillo entre los dientes”.
Datos Técnicos:
Carrera: II Trail Villa de Teror
Fecha: 21 de Julio de 2012.
Tiempo: 02:14"56.
Puesto: 52 General. 8 Elite. 5 Local. (236 Finishers).